Cuando fumar va más allá que un simple “mal hábito”

Hablemos un poco sobre el consumo perjudicial de nicotina

Fumar no es solo una costumbre ni un simple “supuesto vicio”. Actualmente hay evidencia científica sólida que ha demostrado que el consumo de tabaco y otros productos con nicotina produce una dependencia real.

Está reconocida como un trastorno mental y del comportamiento según diversas fuentes y organismos internacionales que evalúan este campo. Este se conoce como trastorno por uso de nicotina y afecta tanto al cuerpo como a la mente, siendo una de las principales causas prevenibles de enfermedad y muerte en el mundo.

¿Qué es la nicotina y por qué genera tanta adicción?

La nicotina es una sustancia química presente en el tabaco que actúa directamente sobre el cerebro. Al inhalarla y absorberla, estimula la liberación de dopamina, un neurotransmisor asociado al placer y la recompensa.

Este efecto produce una sensación momentánea de bienestar, concentración o relajación, que dura poco tiempo. Cuando los niveles de nicotina bajan, el cerebro “pide más”, generando craving (deseo intenso de consumir). Con el tiempo, el cuerpo se adapta y necesita cada vez mayores cantidades para lograr el mismo efecto, lo que refuerza el ciclo de la adicción.

Formas de consumo

Aunque el cigarrillo tradicional sigue siendo el más común, hoy existen otras formas de consumo que también contienen nicotina y pueden causar dependencia:

  • Cigarrillos electrónicos o vapeadores. Aunque se promocionan como “alternativas seguras”, muchos liberan nicotina en altas dosis y compuestos dañinos para los pulmones.
  • Tabaco sin humo. Como el rapé o el tabaco de mascar, que también se asocian con cáncer oral y enfermedades cardiovasculares.
  • Pipas y puros. Suelen inhalarse menos, pero igualmente exponen a sustancias tóxicas.

Señales de que hay una dependencia a la nicotina:

El trastorno por uso de nicotina se caracteriza por la pérdida de control sobre su consumo. Algunas señales de alerta incluyen:

  • Intentos fallidos de dejar de fumar.
  • Consumo a pesar de conocer los daños.
  • Ansiedad o irritabilidad cuando se intenta suspender.
  • Necesidad de fumar inmediatamente al despertar o en momentos de estrés.
  • Priorizar el consumo sobre otras actividades o responsabilidades.

Consecuencias para la salud

El tabaquismo causa más de 8 millones de muertes al año a nivel mundial. La nicotina en sí es adictiva, pero los mayores daños provienen de los miles de sustancias tóxicas que se generan al quemar el tabaco.

Algunos de sus efectos más conocidos son:

  • Cáncer de pulmón, boca, garganta y vejiga.
  • Enfermedades cardiovasculares (infarto, hipertensión).
  • EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) y enfisema pulmonar.
  • Disminución del rendimiento físico y sexual.
  • En mujeres embarazadas: riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer.

¡En cuanto a su tratamiento… sí se puede dejar de fumar!

  • Superar una adicción a la nicotina no es cuestión de solo tener fuerza de voluntad, sino de un trabajo arduo y continuo que va de la mano de un equipo especializado en Salud Mental (médico psiquiatra, psicología, enfermera especialista) con acompañamiento familiar y psicosocial.

Las estrategias más efectivas incluyen:

  • La terapia cognitivo conductual (TCC), es el tipo de psicoterapia que más ha demostrado tener eficacia, ya que ayuda a identificar y modificar los patrones asociados al consumo.
  • Medicamentos como la vareniclina o el bupropión pueden ayudar a reducir la ansiedad y el deseo de fumar. Es importante ser evaluado primeramente por un médico psiquiatra para su prescripción y para la detección e intervención oportuna de otros trastornos comórbidos o duales.
  • Es muy importante contar con un grupo de apoyo comunitario y participar de los programas de cesación de tabaquismo que hay en las distintas entidades de salud de nuestro país, donde se sigue un plan de evaluación y seguimiento de trabajo, además de que compartir las experiencias refuerza la motivación.
  • También existen terapias de reemplazo de nicotina como los parches, chicles, inhaladores; sin embargo, estos no se encuentran disponibles en Panamá actualmente.

Recuerda que…

El consumo de nicotina puede llevarte a desarrollar una adicción, que es una enfermedad que afecta neurobioquímicamente al cerebro y no una falta de carácter.

En nuestra sociedad, hoy en día, está normalizado y hasta legalizado su consumo, sin embargo, el número de consecuencias negativas que acarrea en las distintas esferas de la vida (personal, familiar, laboral, social, etc.) supera los positivos; por lo tanto, reconocer que se tiene un problema con la sustancia y aceptarlo es el primer paso hacia el camino de la recuperación. Prevenir el inicio y / o abandonar el consumo mejora la salud y las relaciones, la calidad de vida y reduce significativamente el riesgo de desarrollar enfermedades graves, principalmente de tipo cardiopulmonar y cerebral. Nunca es tarde para empezar a respirar mejor, vivir más y vivir mejor.

Cada intento cuenta, y muchas personas logran dejar de fumar después de varios intentos con la ayuda adecuada. Buscar ayuda es un acto de valentía y autocuidado.

 

Dra. Tuñón / Chow

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